Ciudad de México, 14 de noviembre (SinEmbargo).– Autoridades y ciudadanos de Chiapas son, por segundo día consecutivo, protagonistas por discriminación en la prensa local y nacional.
Una joven de 19 años fue detenida en su domicilio por policías municipales de Arriaga, supuestamente por el delito de secuestro; sin embargo, familiares de Alejandra Isabel Rivera denuncian que el cargo es falso y que el verdadero motivo se debe a que mantiene una relación con otra chica de la misma edad.
El pasado 12 de noviembre la usuaria de Twitter Montserrat Balcorta denunció a través de la red social la discriminación de la que fue víctima su amiga indígena guatemalteca, cuando por su aspecto físico los trabajadores de la cafetería “Oh la la! Pastelería Francesa”, en San Cristóbal de las Casas, la sacaron porque la confundieron con una vendedora ambulante .
De acuerdo con reportes de la prensa local, Ali Roxox, quien actualmente estudia Doctorado en el Centro de Estudios Superiores de México y Centroamérica de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas, dijo que lamentable que en el siglo XXI los indígenas son considerados como “personas inferiores sólo por su identidad étnica” y que son asociados en este contexto con el comercio informal, con el analfabetismo, y son discriminados por su condición económica, educativa, cultural y de género.
La tía de la joven, Bertha Rivera López, dijo al sitio electrónico NoticiasNet, que un grupo de policías ingresó al domicilio alrededor de las 15:30 horas, con agresiones físicas y verbales, se llevó a la joven al ministerio público, en donde la obligaron a firmar una declaración por un delito que no cometió.
“A mi sobria la detuvieron como a un delincuente de alta peligrosidad. Se la llevaron a golpes e insultos al ministerio, y cuando el abogado de la familia acudió a defenderla, no lo dejaron entrar”, dijo Rivera López.
El ministerio público, Alejandro Palacios, negó la asesoría de un abogado a Alejandra Isabel Rivera; en cambio la joven fue trasladada la noche del domingo 10 de noviembre a la cárcel municipal y, más tarde al penal de Tonalá, en donde purga la condena de privación ilegal de la libertad y trata de personas.
La tía de Alejandra indicó que su sobrina no es ni secuestradora ni tratante y que los padres de su novia fueron quienes interpusieron la denuncia porque no están de acuerdo con la relación lésbica de las jóvenes.
“Jorge Sánchez Alemán y Matilde Espinosa Santos están enojados porque su hija tiene novia y no novio, y utilizaron sus influencias para detener a Alejandra”, sostuvo Bertha Rivera.
Los familiares de Alejandra Isabel Rivera han presentado pruebas a las autoridades para demostrar su inocencia, como cartas de amor que su novia le envió que indican que Alejandra jamás la secuestró.
Bertha Rivera hace un llamado al procurador del estado, Raciel López Salazar, para que Alejandra sea liberada y para denunciar al ministerio público, Alejandro Palacios, por discriminar y juzgar injustamente a la joven.